Este vídeo sí que refleja fielmente lo que vi con mis propios ojos, que mi cámara no pudo captar por sacarla demasiado tarde y en mal sitio (había otras cosas que hacer en aquel momento...). Es una visión que no se olvida. Hasta los rascacielos más imponentes pueden llegar a parecer flanes. No somos nada, blablabla...