sábado, 30 de octubre de 2010

Pasaje al infierno



Gracias al excelente programa "The Best House 123" de Fuji TV he aprendido todo tipo de curiosidades. El lema de este programa, según el libro sobre el mismo que compré recientemente, es "conocer los tres mejores ejemplos de una categoría determinada para comprenderlo todo sobre ella". En este programa en concreto que vi ayer se habla de lugares turísticos peligrosos. El número 3 de la lista es la llamada "piscina del diablo" en las cataratas del Lago Victoria.



El número 2 me resultaba completamente desconocido. Sin embargo, es tal su fama que ha acabado por convertirse en un lugar de atracción turística para los más osados.



Los lugareños se refieren a él como "las puertas del infierno". La verdad es que el demonismo y la creencia en el averno son símiles recurrentes para estos parajes.



Esta cavidad infernal no fue creada de forma natural, sino que se debió a un accidente durante unas prospecciones realizadas en Darvaz (Turkmenistán) 1971. Al parecer, los geólogos andaban a la búsqueda de gas, y a buena fe que lo consiguieron. Durante la excavación el suelo se derrumbó (debido a la caverna que se hallaba en el subsuelo) y produjo un colosal agujero de unos 70 metros de diámetro. Para evitar la propagación del gas venenoso, decidieron inflamarlo para que se extinguiese al cabo de un tiempo. Siempre es mejor que liberar metano a la atmósfera. Esto supone una sabia lección para todos aquellos que expelen sus ventosidades sin remilgos ni remordimientos de conciencia.



Pero la cuestión es que, casi 40 años después, sigue y sigue ardiendo cual pila de Duracell mal reciclada. En abril de este año el presidente del país visitó el sitio y ordenó su clausura. ¿Dejará el infierno de acechar con su presencia a la vuelta de la esquina?

Me imagino que ahora estaréis ansiosos por saber quién ocupa el primer puesto... Dejémoslo para la siguiente entrada.

martes, 26 de octubre de 2010

Ánimo y... ¡que te den por culo!

Habeces uno no repara en ello hasta que experimenta en sus carnes la mala pasada que le juegan inconscientemente algunos elementos de su propia idiosincrasia. Entre estos elementos destacan los gestos: lo que en apariencia no pasa de ser una combinación de muecas o movimientos de extremidades, más o menos inequívocas e internacionales, se convierte en un pérfido traidor cuando interactúan los integrantes de culturas distintas.

No hay que ir muy lejos para encontrar diferencias tan notables como el inocuo símbolo de la victoria. Mostrar el lado exterior de los dedos índice y corazón a tu interlocutor no pasa de tener el significado de '2' en español, mientras que en Inglaterra equivale al corte de manga. ¿Por qué?

Los orígenes se remontan a los tiempos de la Guerra de los Cien Años entre franceses e ingleses. Los arqueros ingleses eran célebres por su destreza. Buena muestra de ello fue la Batalla de Agincourt, donde un ejército inglés formado en su gran mayoría por arqueros masacró con sus arcos largos al ejército rival. No resulta de extrañar, pues, que los franceses procedieran ipso facto a mutilarles ambos dedos una vez hechos prisioneros, para evitar que utilizasen el arco. De ahí que los ingleses se los mostrasen en señal de desafío como diciendo: «Todavía tengo mis dos dedos con los que utilizar el arco, ¡temblad!».

Si bien existen diferencias entre países cercanos, la lista se antoja abundante al contraponer nuestros ademanes con los de una cultura oriental. El gesto de la victoria viene a cuento para ejemplificar el de las tres chicas de la foto. Después de preguntar a varios japoneses, me han dicho que transmite la idea de 'ánimo' y de 'dar lo mejor de sí mismo', reflejado en el tan manido verbo japonés ganbaru (頑張る). La pose del brazo erguido tiene un significado de 'fuerza'.

Sin embargo, un japonés que utilizase este gesto como señal de apoyo o ánimo en nuestras tierras estaría expresando sin quererlo un sentimiento ciertamente diferente.


viernes, 22 de octubre de 2010

¡Cuidado con las abejas!

¿Qué tendrán los japoneses que sus carteles escritos en japanglish resultan tan entrañables como aquellos que no presentan en principio errores de bulto? Lo cierto es que este ejemplar, hallado en la Aldea folclórica de Hida (Hida no sato) me pareció tremendamente simpático. Por supuesto, no falta el dibujito de la abeja. ¿Sería un juego de palabras intencionado?


lunes, 18 de octubre de 2010

Kanjis de países

Si bien la mayoría de los nombres de países se escriben en katakana, el silabario japonés utilizado especialmente para los extranjerismos, hay algunos que tienen su propia versión en el sistema de ideogramas japoneses: los denominados kanji, cuya veneración solo es comparable al odio que suscitan entre algunos estudiantes de japonés.

Resulta interesante saber qué kanji le ha tocado a cada nación. En el idioma chino la asignación se basa en la pronunciación del país en cuestión. Así pues, para el español se utilizan tres ideogramas cuya transcripción fonética sería más o menos /shipanya/: 西班牙. Las ideas que representan son 'oeste', 'grupo' y 'colmillo', respectivamente. Esto funciona también para el japonés: de hecho, si escribís amerika o ajia (Asia en japonés) con el teclado, os saldrá también la versión en kanji: 亜米利加 y 亜細亜 respectivamente.

Pues bien, en caso de tener que emplear uno solo de estos caracteres para representar al país, se escoge el primero: en este caso, oeste. De esta forma el concepto de España se puede abreviar en un solo carácter. De ahí que el concepto «diccionario japonés-español» se pueda escribir en solo cuatro caracteres: 和西(japonés-español)辞典(diccionario).

Dado que los japoneses adoptaron los ideogramas chinos hace siglos, pensaba que esta influencia se reflejaba aún hoy día en las coincidencias entre ambos idiomas para la asignación de ideogramas, pero veo que no son totales. Por ejemplo, 米 ('arroz') es el kanji japonés para Estados Unidos, mientras que el correspondiente en chino es 美 ('belleza'). Hay otros ejemplos. He aquí una pequeña lista:

País
Kanji
Significado
Notas

Irlanda

Amor


EE. UU.

Arroz

En chino:

Argentina

Sub- o “a” para transcripciones fonéticas

Los ejemplos citados de 亜細亜 o 亜米利加. En chino suelen emplear , ideograma que los taiwaneses suelen identificar con Afganistán.

Inglaterra

Distinguido


Italia

“i” para transcripciones fonéticas

Italia: 伊太利亜. En chino designa a Irán, pero el primer país que se le viene a cabeza a una taiwanesa es Irak. En realidad vale para ambos.

India

Marca, sello


Indonesia

Monja (budista)


Egipto

Polvo


Australia

Magnífico, extraordinario

Australia: 濠太剌利. En chino:

Austria

Tierra, costa

Austria: 墺太利. En chino:

Holanda

Orquídea


Canadá

Añadir


Grecia

Raro


Suiza

Buen augurio, auspicio


España

西

Oeste


Tailandia

Tranquilidad


Corea


Actualmente se refiere sobre todo a Corea del Sur, aunque su significado original sea ‘China’.

Alemania

Soledad

En chino: (‘ética’)

Japón

Sol


Hungría

Inundación


Filipinas

Comparación

En chino designa a Bélgica.

Finlandia

Perfume


Brasil

Conde

En chino:

Francia

Buda

En chino: 法 (‘ley’)

Bulgaria

Brusco, levantamiento

'Brusco' va al pelo para el carácter búlgaro. Curiosidad: 勃起 significa ‘erección’. Sí que es un 'brusco levantamiento', sí.

Vietnam

Sobrepasar, exceder


Perú

Secreto


Bélgica

Blanco


Portugal

Uva


Malasia

Caballo


Birmania

Hilo fino


México

Tinta


Mongolia

Ignorancia

¿Resentimiento japonés? Mira que tratar de invadir Japón en medio de un tifón... Ignorantes.

China

Centro


Rusia

Rocío

En chino: (‘repentino’)

Taiwán

Máquina


Polonia

Ola


miércoles, 13 de octubre de 2010

Liu Xiaobo


Probablemente a estas alturas cualquiera conoce a Liu Xiaobo, el disidente chino más famoso que ha recibido recientemente el Premio Nobel de la Paz. Está condenado a 11 años de prisión, mientras que su mujer permanece bajo arresto domiciliario. Su delito consiste en haber sido uno de los principales redactores de un manifiesto, conocido con el nombre de Carta 08, en el que instaba al gobierno chino a implantar derechos tales como la libertad de expresión o el pluripartidismo. Como dice la Wikipedia:

El texto exige que el gobierno chino lleve a cabo reformas en la constitución para promover o permitir un sistema multipartidista, un sistema judicial independiente, la separación de poderes, el control público de los funcionarios públicos, cumplimiento de los Derechos Humanos, elección democrática de los funcionarios públicos, igualdad entre el campo y la ciudad, libertad de asociación, libertad de reunión, libertad de expresión y libertad de religión, educación cívica, protección de la propiedad privada, reforma fiscal y financiera, creación de una Seguridad Social, protección del medio ambiente, la creación de una república federada y una comisión de la Verdad y la reconciliación.

Por todos es conocida la oposición de China a la concesión del premio, la detención de disidentes y el denuedo continuo por acallar cualquier voz opositora, ya que siempre se teme que este tipo de sucesos pueda generar la tan temida revolución. Por lo que parece, el nombre en chino de Liu y el término Premio Nobel fueron censurados en la red social Twitter. El aparato censor ha impedido que la noticia apareciese en las portadas de los medios. ¿Y qué pasa con los medios extranjeros en china?

Pues según me comenta mi amigo Kang, un chino que vive en Japón, la señal de la CNN se cortó justo cuando iban a mencionar el tema, y se restauró cuando cambiaron de tercio. Pese a que la mayoría de los chinos que viven en su tierra natal desconocen a Liu Xiaobo, este no es el caso de los expatriados como Kang, que no ven razón para imponer una censura tan indisimulada. Mantener la armonía entre 1300 millones de personas no es tarea fácil, pero la represión ejercida por el gobierno chino no ha cambiado un ápice; se muestra igual de intransigente y anquilosado que antaño.

El siguiente vídeo no está relacionado con Liu Xiaobo, pero me resulta interesante esta minibiografía visual del artista chino Shui-Bo Wang. Fue uno de los candidatos a los Óscar en la categoría de mejor documental corto.

sábado, 9 de octubre de 2010

Vacaciones estivales 2010 (y 3)

A medida que uno envejece, se va dando cuenta poco a poco de que necesita sentirse identificado, pertenecer a un determinado lugar. Este apátrida recorre otras partes del globo por curiosidad, pero hay ciertas sensaciones que solo tu tierra natal parece poder proporcionarte. Cuando regreso en la época estival a ese pueblo en donde los veranos pasaban volando, me doy cuenta de lo rápido que pasa el tiempo. Me parece estar viviendo todo demasiado deprisa; quiero detenerme y contemplar, cavilar, incrustar en mi mente de forma indeleble esa serie de vivencias que se disfrutan en el momento y se reviven en el recuerdo. No quiero discriminar ningún día ni dejar pasar las horas, pero sí quiero huir del dolor y la desdicha. Las pasiones conviven y no se pueden manejar a placer, incluso para alguien con un sentido tan epicúreo de la vida.


Sin embargo, qué fácil y armonioso fue todo a lo largo de este último verano. ¿Será el sol de España? ¿Sus gentes, sus parajes? Cudillero nos acogió con su perenne encanto, una ciudad que antaño permanecía oculta a ojos de cualquier posible invasor, una población que se asienta sobre la rasa litoral como un jinete a horcajadas sobre su caballo. Si por mar no lo puedes divisar, por tierra solo lo vislumbras hasta que aparece ante ti en todo su esplendor.



No han sido pocos los vestigios que nuestra invitada asiática ha podido visitar, y uno de ellos fue el castro de Coaña. Puede que no sea mundialmente conocido, pero personalmente me resulta apasionante encontrarme al lado de unos asentamientos celtas del siglo I. Nos hallamos ante prácticamente dos milenios de historia. Párate a pensar por un momento en las piedras que estás tocando (infringiendo las reglas, pero en caso de llegar desde el Lejano Oriente te perdonamos), las personas que las han puesto ahí hace tanto, tanto tiempo... No te limites a ver e inmortalizar en algo que ni siquiera imprimirás, tienes que imaginar, ser consciente del legado histórico que hemos recibido y conservado. Imagínate las vidas de esos celtas por un momento y olvídate del olor de esa fábrica de celulosa cercana. Estás viendo los propios molinos y morteros que utilizaban personas hace 2000 años.


Asturias tiene tantas ciudades con encanto... Uno de mis descubrimientos en este viaje fue Oviedo. ¡Qué casco antiguo tan hermoso! Paseando por él y disfrutándolo creo que hasta sería capaz de soportar mejor el libraco que tan infumable me pareció hace 10 años: La Regenta. Esa Vetusta que me sumía en el hastío se me hace más apetecible y amena. Paseamos alrededor de la catedral y cenamos un revuelto de gambas, setas y ajetes tiernos que se convirtió en uno de los favoritos de Mika. La verdad sea dicha, lo hicimos en el único sitio de la calle Gascona que no servía sidra.



Llanes fue otro de los pueblos asturianos que visitamos, en plenas fiestas patronales. Lo cierto es que vi aún más cosas que en la última visita del 2007. Curiosamente era un sitio cuyo único recuerdo para mí consistía en una máquina recreativa del hotel en donde nos habíamos quedado en tiempos casi inmemoriales. Los famosos Cubos de la Memoria de Ibarrola en el espigón del puerto de Llanes, con sus innumerables escorzos, constituyen la más singular de la escolleras que servidor haya visto nunca. Pese a todo, el malecón de Tapia siempre tendrá mucha más magia y vida para mí. Quizá sea por lo que representa, pero el rugido del batir de las olas allá no tiene precio.


No solo de Asturias vive el hombre, ni el turista. Cantabria ofrece un amplio abanico de posibilidades, y en este caso volví sobre mis pasos. Recorrí de nuevo los adoquinados de Comillas y Santillana del Mar. Recordemos que el primero (2007 con Jorge y Borja) solo lo había visitado de noche y en plan famélico, en una búsqueda desesperada en pos de una posada que resultó ser infructuosa.





En esta ocasión pudimos disfrutar de Comillas en pleno día y me pareció un destino turístico esencial y además un lugar nada despreciable para pasar las vacaciones, por su playa, cuya existencia desconocía por completo, tan breve e incompleta había sido la visita anterior.



También visitamos el Capricho de Gaudí, una obra fiel a su estilo genuino que no deja a nadie indiferente. Merece la pena detenerse en las estancias y echarle una buena ojeada a los libros sobre esta obra del arquitecto catalán. Al igual que en la Casa Batlló, uno puede perderse muchos detalles si no tiene el tiempo necesario para deducirlos o la curiosidad inquisitiva para leerlos u oírlos. Los japoneses se pirran por Gaudí, y de hecho su propietario es un empresario japonés: Taketo Kurosawa (nombre fácilmente manipulable a "Kateto"). Dentro del museo me fijé en un póster con el currículo de un experto en Gaudí que acabo de recordar ahora a través de una noticia: Hiroya Tanaka. Recomiendo leer la noticia para enterarse sobre lo ocurrido con esta obra.

Santillana del Mar es un destino clásico y con un encanto inconfundible. Su empedrado, sus balcones engalanados de florida presencia, sus tiendas con productos de la región, de nombres sugerentes y cachondos... Si al deleite de pasear por sus calles le aderezamos su proximidad a la Cueva de Altamira, Patrimonio de la UNESCO, este pequeño municipio representa un destino turístico de la máxima prioridad. Me pregunto si mis padres y mi tío habrán ya devorado las anchoas de Santoña que les compró Mika como souvenir. Sí, esas que Revilla le regala siempre a Zapatero.


Terminamos el viaje por el Cantábrico de la mejor forma posible: disfrutando al alimón de mi pescado favorito. La palometa roja, conocida por el nombre de virrey en Asturias, fue todo un manjar que sirvió de broche de oro para nuestro periplo por el norte de España. No podían faltar las sidras de rigor que nos atrevimos a escanciar a nuestra manera.





lunes, 4 de octubre de 2010

Fauna barraquera 2: San Froilán 2010

Es un panorama sobrecogedor. La migración de anguilas y salmones, ñus y antílopes, gansos y cisnes... Todos ellos recorren grandes distancias con el único objetivo de la supervivencia, la reproducción o ambas cosas. Son los grandes conocidos de la migración animal, pero hoy dedicamos a este espacio a una especie menos conocida, pero cuya hazaña resulta igualmente loable por su tesón, su talante de viajero impenitente que deja atrás su añorada tierra y su bienamado ganado. Son los homo aldeensis, más conocidos como aldeas.

Resulta difícil imaginarse un San Froilán sin estos individuos tan campechanos, de mejillas sonrosadas, piel hirsuta, manos callosas y ceño poblado. Cuando nos deleitan con su presencia en otras épocas del año, se concentran en su lugar predilecto, al amparo de la Marina Española. Noches de impacto, de arrebato y de como se llamen los demás baretos de esa calle.

No nos llevemos a engaño; sin el sacrificado trabajo de sol a sol por parte de muchos miembros pertenecientes a esta especie, nuestras vidas no serían lo mismo. El que carezca de sangre aldeana que fluya por sus venas podrá moverse en la ciudad como pez en el agua, pero se ahogará sin remisión ante la hombrada que se le antoja el matar a un animal. El rostro del ciudadano fuera de su elemento se torna macilento ante la matanza que presencia, y a los ojos del recio labrador ese otrora impasible y voraz consumidor de carne no es más que un lechuguino, un pazguato que, como tal, se pasma ante el milagro que presencia cuando ase la tetilla de una ubre para exprimir sus contenidos. Es entonces cuando el noble hombre del campo esboza la misma sonrisa que merece el hallar su presencia, el reparar en su porte y el escuchar sus palabras. ¿Qué diría un hombre refinado de antaño, un individuo de hogaño y un homus aldeensis ante la misma situación? No he podido evitar mojarme y plasmar mis conjeturas en negro sobre blanco:



—¡Voto a bríos que ese bellaco pagará cara su osadía!
—¡Maldita sea su estampa!
—¡Cajo na cona co pariu!

—Sin palabras me hallo ante tamaño desaguisado.
—Vivir para ver.
—¡Manda carallo!

—¿Me concede este baile vuesa merced?
—¿Quieres bailar conmigo?
—¿Jastas pista, moza?

—¡Ah, de la puerta!
—¿Podría abrirme, por favor?
—¿Abres ou non?

—¡Alabado sea Dios!
—¡Dios mío!
—¡¡Cajondiola!!