Cuando quedé con mis amigas italianas para ir al Designfesta hace ya buena, toda la gente que estaba en mi vagón se bajó en la misma parada, dos antes que la mía. La sensación de tener el vagón solo para mí me resultaba tan sospechaba que sentía un impulso cuasi irrefrenable de seguir a la manada. Algo tenía que estar haciendo mal, si todo el mundo se bajaba. ¿Es que a nadie le interesaba Shinkiba? Me imaginaba el significado del mensaje que se oía por la megafonía:
Atención, señores pasajeros, este tren procederá a despeñarse por el barranco de Sakamoto, rogamos se apeen en esta parada si todavía aprecian su vida.
Al final decidí mantenerme en mis trece y llegué a la estación sin problemas. Quién sabe, igual no me había echado desodorante aquel día.
¿Pero Japón no era famoso por esos trenes atestados de gente? Pues sí, si quieren verlo con sus propios ojos no se pierdan el siguiente capítulo de esta miniserie.
Hola buenas.
ResponderEliminarTengo que decirte que no deberias poner estos videos que le sacas a uno las ganas de ir a visitarte; y tambien que no te preocupes, que los de Lugo (solo nosotros)por si no te acuerdas, tenemos la costumbre de ir siempre en direccción contraria al resto de la gente. Nos vemos en Noviembre, espero que estes nervioso por nuestra llegada ya que es posible que se arruine tu reputación. Chao